Efectos secundarios y contraindicaciones del drenaje linfático
Una vez ya hemos visto qué es el drenaje linfático, conviene saber también cuáles son sus cointraindicaciones y quiénes lo practican, para así tener una experiencia mucho más agradable y segura.
La Red Nacional de Linfedema enumera cuatro circunstancias
en las que se debe evitar el drenaje linfático:
Cuando los pacientes que han desarrollado un linfedema
después de haberse sometido a cirugía, padecen una hinchazón súbita o localizada.
En estas circunstancias, se recomienda a los pacientes suspender el tratamiento
y ver a sus médicos para que les sometan a una evaluación lo antes posible.
Los pacientes con un inicio repentino de linfangitis deben
suspender inmediatamente el tratamiento hasta que se trate la infección y se
aclare de qué le viene. Los pacientes que tienen un mayor riesgo de coagulación
de la sangre deben hacerse la prueba para descartar la trombosis venosa
profunda, antes de ser tratados. Durante el tratamiento, estos pacientes deben
llevar un seguimiento exhaustivo por su médico, y las pruebas deben realizarse
de forma periódica.
Los pacientes que tienen insuficiencia cardíaca congestiva
deben ser minuciosamente monitorizados para evitar mover demasiado líquido
demasiado rápido, lo que podría producir tensión en el corazón.
Cuando el dolor está presente, el tratamiento debe
suspenderse hasta que la causa subyacente sea determinada y el dolor disminuya.
Profesionales del drenaje linfático
Los profesionales que realizan el drenaje linfático pueden
ser médicos, enfermeras, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales o terapeutas
de masaje. Además de su trabajo habitual, la mayoría requieren instrucción
adicional en el tratamiento del linfedema. Se han establecido directrices para
la formación del drenaje linfático por la Asociación de Linfología de América
del Norte, que administra los exámenes de certificación.
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